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  • Ileana González Castillo

Medios de comunicación y política


Hoy en día no podemos imaginar una vida política sin la presencia de los medios de comunicación; si nos preguntamos el porqué, basta imaginar por un momento el poco alcance que se lograría en los procesos electorales sin la difusión de spots en la radio, televisión, Internet, periódicos y revistas.


Esta relación permite que los partidos usen a los medios en su beneficio, mientras al mismo tiempo, los medios periodísticos utilizan a los políticos para su propia conveniencia. Estas dos esferas de poder se necesitan mutuamente y de esta relación cada una obtiene diferentes ganancias.


Actualmente, los medios ejercen un enorme poder político en nuestras sociedades. Angelika Rettberg (1) en Medios, democracia y poder, afirma que debido a su gran impacto en la divulgación de noticias y en la formación de opiniones, los medios de comunicación han sido catalogados como el cuarto poder de las democracias modernas, sumándose a los tres poderes tradicionales: el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial. (2)


1 Profesora asociada y Directora del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de los Andes.

2 Rettberg, Angelika (coord.). Medios, democracia y poder. p.1.

 
 

El papel de los medios de comunicación en las democracias es indispensable puesto que son quienes divulgan información y dan a conocer los acontecimientos ocurridos durante los procesos electorales. La industria de la comunicación puede ser tanto pública como privada y, por lo tanto, se rige bajo determinados criterios establecidos en relación con lo que deciden que se exponga al público y lo que no.


La competencia de las empresas dedicadas a la comunicación los obliga a producir contenidos entretenidos que apelan a las emociones de las personas, y que, según algunos, inducen a la alienación política, el cinismo, la apatía y la pérdida de capital social y cultural. (3)


3 ibídem.


Independientemente de las preferencias que adopten los individuos, es indispensable tener presente que las democracias requieren ciudadanos activos que se informen, sea cual sea el medio de comunicación, acerca de la situación no sólo política, sino social, cultural y económica de su país.


Giovanni Sartori, en Homo videns, afirma que como la democracia representativa no es un gobierno del saber, sino un gobierno de la opinión, es importante que el público tenga opiniones propias. Por ello, considera grave el poder que ha adquirido la televisión, porque modifica el ideal de la democracia.


Este importante investigador del campo de la ciencia política profundiza en la manera en que la televisión ha intervenido en la construcción del pensamiento. El punto central de su discurso es “el hecho de que la televisión modifica radicalmente y empobrece el aparato cognoscitivo del homo sapiens”.(4) Según Sartori, este homo sapiens debe todo el avance de su entendimiento a su capacidad de abstracción; así pues, su saber se desarrolla en la esfera de un mundus intelligilibis, que no es el mundo percibido por nuestros sentidos.


4 Sartori, Giovanni. Homo videns o la sociedad teledirigida. p. 17

 
 

Por esta razón, menciona que la televisión solamente produce imágenes y anula los conceptos y de este modo atrofia nuestra capacidad de abstracción y con ella, toda nuestra capacidad de entender.


Por lo tanto, lo que nosotros vemos no produce ideas pero sí transmite significados e imágenes, y éste es el proceso mediante el cual el homo sapiens es desplazado por el homo videns. En este último, el lenguaje conceptual (abstracto) es sustituido por el lenguaje perceptivo (concreto) que es infinitamente más pobre. (5)

5 cfr. ibíd. p.48.



De esta manera, los diferentes tipos de medios de comunicación tienen impactos distintos según el tipo de consumidor al que se dirigen y el modelo de consumidor que desean crear. Por ejemplo, es diferente la televisión que se hace para empresas públicas o de paga; además, pueden considerarse otro tipo de variables como edad, lugar de origen o condición socioeconómica de los televidentes.



Así, los partidos políticos y candidatos le otorgan cada vez más importancia a los medios de comunicación, en particular a la televisión, para realizar sus actividades de campaña, por ello, buscan aparecer en ellos tanto como sea posible.

 

Revisa nuestro ensayo sobre: DIOS Y EL ESTADO… Y EL CINE

 

La televisión es considerada ampliamente como el instrumento más importante para realizar campaña y comunicarse con los electores, sobre todo en aquellos países en que tiene amplia cobertura y audiencia.


La política se beneficia de los medios en cuanto permite enviar la información que los políticos y los gobiernos consideran que los ciudadanos deberían saber y recogen las reacciones del público acerca de diferentes acciones, sirviendo así de caja de resonancia que orienta la formulación de políticas públicas. (6)


6Rettberg, Angelika (coord.), óp. cit., p.3


Respecto a esto, Sartori utiliza el término “video-política” para referirse a uno de los múltiples aspectos del poder del video: su incidencia en los procesos políticos y con ello la transformación de cómo ser políticos y de cómo gestionar los asuntos de la política.


Un país democrático es aquél en el que la opinión de los ciudadanos es tomada en cuenta; sin embargo, en muchas ocasiones, esta opinión está fuertemente influida por los medios de comunicación y en especial por la televisión, ya que el poder de la imagen es el que se coloca en el centro de todos los procesos de la política.

Con la televisión, la autoridad es la visión en sí misma, es la autoridad de la imagen. No importa que la imagen pueda engañar aún más que las palabras. Lo esencial es que el ojo cree en lo que ve; y, por tanto, la autoridad cognitiva en la que más se cree es lo que se ve. Lo que se ve parece real y lo que implica parece verdadero. (7)


7 Sartori, Giovanni. óp. cit., p.72.

Por lo tanto, las decisiones de la población están basadas solamente en las imágenes emitidas por la televisión y no en los asuntos políticos importantes, por ese motivo, dudamos acerca de que este medio fortalezca realmente la democracia.

Otra de las formas que en nuestros días se utilizan para conocer “lo que piensa la gente” son las encuestas y sondeos, puesto que con su medición se puede tener una idea de preferencias e intenciones políticas. Con su aplicación, el aparato político puede tener un mejor conocimiento de aquellas cuestiones que interesan a la sociedad, y en particular, al individuo.

FUENTE: http://testamarketing.com/2012/03/29/resumen-de-encuestas-electorales-en-mexico-marzo-2012/

La Internet es otro de los medios más prácticos que la gente utiliza para estar enterado de las situaciones políticas que enfrenta el país; ahora ya no es necesario contar con una computadora en la casa o en la oficina; basta solamente con tener acceso a un smartphone o tableta electrónica para que los usuarios puedan estar informados de los acontecimientos más importantes.


Cada medio de comunicación es libre de dar a conocer su postura respecto a determinado candidato o preferencia electoral ya que esto le aporta más emoción, más entretenimiento y más pasión a la política.



FUENTE: http://plandevuelo.mx/site/es-la-comunicacion-politica-indispensable-hoy-en-dia/


Así, la comunicación política consiste en diseñar el partido, la campaña, e incluso el gobierno, como una marca. Los medios pasaron de ser escenarios donde se “representaba” la política orientada por partidos a ser “el lugar de la política”. (8)

8 ídem. p.9

FUENTE: http://mpolitico.com/2016/05/02/la-comunicacion-politica-bases-para-la-construccion-de-una-campana/

Lo anterior lo observamos cuando la televisión condiciona fuertemente los procesos electorales, ya sea en la elección de los candidatos, en la manera de mostrar la batalla electoral o bien en la forma de ayudar a vencer al ganador; es por ello que los noticieros de radio y televisión pueden tener una influencia relativamente fuerte sobre los votantes indecisos.

 
 

Ejemplo de ello son los resultados de la Encuesta Nacional sobre Cultura Política y Prácticas Ciudadanas (ENCUP) realizada en México en el año 2012 por la Secretaría de Gobernación, en donde se da a conocer que el medio más utilizado para informarse sobre lo que pasa en la política es la televisión, registrando un 76.10%, seguido por la radio y la Internet. (9)


9 http://www.encup.gob.mx/work/models/Encup/Resource/69/1/images/Resultados-Quinta-ENCUP-2012.pdf [Consultado el 11 de octubre de 2015].


Del mismo modo, vale la pena hablar sobre el grado de credibilidad de la población respecto a lo que ve, lee o escucha porque, al menos en parte, muchas de las decisiones políticas, económicas y de consumo, están altamente influidas por los medios de comunicación. A esto se debe que año con año, las cifras de gastos en publicidad, financiamiento político y los esfuerzos del gobierno por acceder a los medios sea cada vez mayor.


FUENTE: http://www.proceso.com.mx/494967/en-cuatro-anos-gobierno-pena-gasto-34-mil-mdp-en-publicidad-oficial-articulo-19


Muestra de lo anterior es el aumento que el Instituto Nacional Electoral (INE) otorga a los partidos políticos o autoridades electorales para el financiamiento de las campañas políticas. Durante las elecciones presidenciales del año 2006, este organismo federal ofreció 16 mil 906 millones a los partidos políticos, mientras que en las últimas elecciones presidenciales llevadas a cabo en el año 2012, la cantidad aumentó a 17 mil 452 millones.


Este aumento se debió, en mayor parte, a un incremento significativo del presupuesto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).(10) Por lo anterior, Adriana Amado (11), investigadora argentina de medios, sugiere que las relaciones entre la prensa y el poder están atravesadas por aspectos jurídicos y condicionamientos financieros y que a mayor inversión en propaganda y mayor control mediático, no corresponde mayor éxito en la gobernabilidad.


10 Ugalde, Luis Carlos. “En las urnas: Más dinero, más corrupción”. Nexos en línea. Referencia directa en http://www.nexos.com.mx/?p=15453 [Consultado el 14 de octubre de 2015].

11 Docente e investigadora especializada en temas de comunicación pública y medios en la UNLAM de Buenos Aires y profesora invitada en posgrados de universidades de Iberoamérica.


Los medios de comunicación son objetos controlados, a fin de cuentas, por las esferas más altas de la sociedad, las cuales, de una u otra manera, dictarán hacia dónde se debe inclinar la visión de la opinión pública, la cual es un determinante en la política.


Sin embargo, si bien es cierto que los medios están ahí para darnos a conocer hechos políticos, también es necesario considerar el grado de confianza que depositamos sobre ellos y, lo más importante, no colocar nuestra opinión con base en lo que se nos comunica, sino formar un criterio informándonos adecuadamente.


Referencias Encuesta Nacional sobre Cultura Política y Prácticas Ciudadanas (ENCUP): http://www.encup.gob.mx/work/ models/Encup/Resource/69/1/images/Resultados– Quinta–ENCUP–2012.pdf [Consultado el 11 de octubre de 2015]. Rettberg, Angelika (coord.). Medios, democracia y poder. Bogotá: Facultad de Ciencias Sociales–CESO, 2011. Sartori, Giovanni. Homo videns o la sociedad teledirigida. Buenos Aires: Taurus, 1998. Ugalde, Luis Carlos. En las urnas: Más dinero, más corrupción. Nexos en línea. Consultado en http://www.nexos.com.mx/?p=15453 [Consultado el 14 de octubre de 2015].

 


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